Claudia Llosa y los horrores de la cotidianidad 

Texto: Janina Pérez Arias
Foto: Festival Internacional de Cine de San Sebastian - Intervenida

Claudia Llosa (Lima, 1976), nominada al Oscar a mejor película en idioma extranjero en 2010 por La Teta Asustada, halló en Distancia de rescate, la perturbadora y aclamada novela de la argentina Samanta Schweblin, una manera de continuar con una constante en su filmografía como lo es la maternidad.

Sin embargo, Claudia se dispuso a explorar nuevos territorios. Incursiona en el cine de género, haciendo una interpretación personal de éste a través de ese cálculo perenne que hacen las madres para poder salvar a sus hijos en caso de peligro, así como del nexo que nos une a otra madre absoluta como lo es la tierra.

Distancia de rescate, una historia que logró removerle las entrañas a Claudia. Junto a Samanta Schweblin escribió el guion de esta historia que se desarrolla en una zona rural a donde llega desde la ciudad Amanda (María Valverde) con su hija pequeña, calculando siempre los posibles peligros a los que se pueda exponer la niña. Pronto Amanda trabará amistad con Carola (Dolores Fonzi), quien poco a poco le revelará algo que sucedió con su hijo David. En ese bucólico escenario han ocurrido y siguen ocurriendo cosas que definitivamente resultan difíciles de entender.

El cine de género atado a la realidad

En Distancia de rescate hay algo que trasciende al género, lo roza y lo funde. Se envuelve lo real, lo fantástico y el horror, pero siempre atado a lo real. El clásico género de horror tiene siempre la característica de tener un peligro externo que viene desde fuera, pero en este caso es algo totalmente interno que va apoderándose poco a poco hasta traer la destrucción.

El hecho de que sea un relato dentro del relato hace que te cuestiones dónde estás, si estás en el sueño de la otra persona, si Carola es la proyección de la subjetividad de Amanda, o si Amanda ya se encuentra en su plena transmigración, si está en agonía o si ya está en el campo de los muertos.

Jugar con todas esas lecturas me permitía expandir las versiones de cómo uno se conecta con el material y cómo te relacionas precisamente con los miedos que explora la película.

Las otras formas del miedo

El peligro del miedo no es tanto el miedo en sí, sino cuando el mismo se convierte en paranoia. El miedo no es peligroso, pero sí lo es cuando se deforma y termina por controlarte, generando una especie de trastorno y distorsión de la realidad.

Distancia de rescate trata de los horrores de la vida cotidiana, por lo que esos miedos están conectados con la realidad. Debido a la propia temática y por su atmósfera envolvente e intoxicante, con la protagonista (Amanda) en una especie de fiebre, entras en otros relatos que rozan esos miedos siempre anclados en lo real, lo que te da pie a abrirte a otras posibles lecturas que nunca niegan la otra, o sea, son líneas que van en paralelo.

La conexión entre el miedo y la maternidad

Yo creo que esos miedos que vienen con la maternidad, que obviamente incluyen también a los padres, son a veces prisiones y pueden generar una serie de decisiones que no son necesariamente las correctas. Además, paradójicamente dentro de esa necesidad de proteger a nuestros hijos, es evidente que cortando esa distancia es justo cuando el niño se construye como individuo.

Entonces se trata de cómo gestionar las dificultades que se presentan para lograr ese balance, la angustia que genera y los miedos. Es algo que te acompaña toda la vida, da igual la edad de tus hijos. Pero también esa distancia de rescate nos interrelaciona con el planeta y nos coloca en un discurso totalmente universal, global, inmediato y urgente.

La naturaleza como parte de la historia

En esta historia se juega con que el secreto y la felicidad están en otro lugar, con esa idea de que ‘en el campo voy a estar bien’. Se juega con la presencia de la naturaleza, que va a tener un rol importantísimo a nivel narrativo en la historia, con esta especie de envenenamiento inevitable y que da la sensación de que va a detonar cuando se produce la separación permanentemente de los hijos. Aquí existe una mezcla entre el envenenamiento de la tierra y la maternidad.

La idea era que se empezara a desconfiar de esa naturaleza que en un primer momento parece rebosante y estupenda. Es como cuando vas al supermercado y ves tomates perfectos y bonitos, lo que hace que despierte tus sospechas hacia todo.

Por otra parte, era importante que aunque la acción se desarrolla en ese campo argentino como lugar físico, quería que al mismo tiempo diera la sensación de que esto podría ocurrir en otro lado. No quería anclarlo a una cosmovisión que sea tan particular que anule la posibilidad de que esto te pueda tocar. El problema del medio ambiente es algo que nos afecta a todos absolutamente.

El nexo materno- filial

El nexo materno-filial es el centro absoluto de la novela de Samanta Schweblin, quien le pone nombre a algo que todas sentimos pero que era como innombrable. 

Personalmente el concepto de ‘distancia de rescate’ me tocó, me atravesó de manera muy visceral. Ahora lo utilizo normalmente en mi día a día, no sólo en la relación con mis hijos o conmigo misma, sino también con pasiones o con mis actores porque existe una distancia rescate con todo, hasta con el planeta. Es hacer físico ese nudo que uno siente cómo se encoge dentro de ti cuando tienes la sensación de que puedes llegar tarde, de que no te diste cuenta, de que estuviste distraída durante un instante.

Trabajar con Dolores Fonzi y María Valverde

Lo más difícil fue encontrar la pareja de actrices porque eran dos mujeres que necesitaban tener este espejo energético y estos cruces, esa sensación de energías muy distintas. De manera que el proceso de escogerlas fue importante.

A mí no me gusta ensayar porque creo que rompo un poco la dinámica del proceso de conocerse. De entrada hablamos un poco de tonos, de lo local que era muy importante, pero realmente me entregué a ellas. Confiar tiene que ver también con esto de la distancia de rescate; confiar en el talento y en la entrega de las actrices, y simplemente estar ahí y que sientan fluir la energía.

Filmografía  (selección)

Madeinusa (2006)

La teta asustada (2009)

No llores, vuela (2014)

Distancia de rescate (2021)

 

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