Eva Merseguer es un torrente de humor, creatividad y ocurrencias. No es de extrañar que se sienta como pez en el agua en la televisión ejerciendo de directora creativa, dos palabras que por separado implican grandes retos, firmeza, nadar a contracorriente, además de un incansable y enriquecedor proceso de ensayo y error.

Con más de 15 años de experiencia, Eva no pierde la calma ni su buen humor ni siquiera en situaciones cuando los niveles de estrés parecen alcanzar los números rojos. En su afán por explorar y crear nuevos caminos, continúa dando muestras de frescura y originalidad en uno de los campos más arduos como lo es la comedia.

¿Cómo llegaste a convertirte en directora creativa de televisión? ¿Cuándo te diste cuenta que esto era lo que querías hacer?

En mi caso, fue una evolución. Empecé siendo guionista del programa Homo Zapping y después de trabajar en varios proyectos, Sílvia Abril y yo creamos un formato de infotainment y ahí llegó mi primera oportunidad de ponerme al frente de un programa. Y encima era nuestra idea. Fue un sueño. ¡Aunque solo durara 3 semanas! Se llamaba Las noticias de las 2 y lo recuerdo con muchísimo cariño. Además, fue con ese formato cuando me di cuenta que tenía habilidades para poder coordinar equipos y gestionar la toma de decisiones. Es lo más importante cuando diriges algo: tenerlo claro y saber transmitirlo.

¿Qué se necesita para ser directora creativa?

No creo que haya una fórmula única. Conozco muchos tipos de directores y todos realizan su trabajo de forma excelente. También los conozco de malos, ¡eh!, pero de esos mejor no hablemos. En mi caso, creo que es la organización y la capacidad de saber reaccionar ante los problemas, porque si algo hay en una producción audiovisual son muchos problemas. Saber llevar la batuta con calma y estar preparada para las mil preguntas que te van a acechar cada día: qué plano, qué color, qué camisa, qué versión.

¿Qué recuerdos tienes de tu primera experiencia profesional?

Los mejores. En Homo Zapping entendí que este trabajo era mi lugar en el mundo. Era feliz, suponía un reto importante, pero se me daba bien, podía desarrollar mi trabajo con cierta facilidad, que no quiere decir que fuera la mejor pero tuve la sensación de que encajaba. Además, coincidí con un equipo que amaba su trabajo y que supo contagiármelo. Y como no, con el mejor director que tendré jamás, Jose Corbacho.

¿Qué es lo más difícil y qué es lo más placentero de tu trabajo?

Creo que son las dos caras de la misma moneda. La autoexigencia y el orgullo que sientes por tu curro. Como te gusta lo que haces y te sientes orgullosa de tu curro, tienes que darlo todo, siempre. Y eso es agotador. Como en todas las profesiones, hay días en que las baguettes te quedan torcidas y no pasa nada. Es pan igual y está igual de rico. Y no pasa nada si por un día tu chiste no es el que más hace reír o si no has sido capaz de clavar la escaleta a la primera.

¿Cuál es la experiencia más gratificante de tu vida profesional? ¿Cuál es la menos grata, cómo la superaste y qué aprendiste?

Una que recuerdo con especial cariño fue cuando estuve en el equipo de dirección de las galas de los Goya que presentó Andreu Buenafuente (en 2019 y 2020). Fue un trabajo durísimo, un reto inigualable, pero ver el resultado me compensó con creces. Lo hicimos y lo hicimos muy bien. De hecho, creo que mantenemos el honor de ser las dos galas más vistas de la historia. De la experiencia menos grata me tocó trabajar con una artista un poco complicada que hizo que las grabaciones fueran un suplicio. Me restó mucho a nivel emocional. Aprendí a protegerme y a que no siempre tienes la solución a todos los problemas y hay que saber aceptarlo y lidiar con ello.

¿Una anécdota relacionada con tu profesión que quieras compartir?

Conocer a Ellen Degeneres. Ahora sabemos cosas de ella que no nos gustan, pero desde que arrancó su Talk Show Ellen fue un referente para mí de cómo hacer televisión. Gracias a ella me gustaba más mi profesión, me hacía sentir parte de algo grande. Después charlas con ella y es un humano más, pero me ha hecho disfrutar mucho y sentir que quiero seguir dedicándome a esto. Así que como me enseñaron mis padres, hay que ser agradecida.

¿Quiénes han sido tus fuentes de inspiración? O ¿dónde has encontrado tus fuentes de inspiración?

Mi madre me recuerda que tenía 11 años y estábamos viendo La Cosa Nostra, el programa que presentaba Andreu Buenafuente en TV3 y que muy seria mirando la tele dije: 'un día ese señor será mi jefe’. Y así fue, durante casi 10 años de mi vida. Para mí la factoría El Terrat ha sido un referente de cómo hacer televisión y encima trabajando con algo tan delicado como el humor. Y a nivel internacional, Tina Fey, Ellen Degeneres, Catherine Tate, Phoebe Waller-Bridge.

¿Cómo pueden las mujeres lograr mejores condiciones de trabajo en la industria audiovisual?

Visibilizando la desigualdad que existe ahora mismo y consiguiendo más cuotas de poder entre las mujeres. Cada vez hay más directoras de producción, más directoras, más productoras ejecutivas y eso se nota. Pero todavía queda mucho curro por hacer, especialmente en el terreno del humor. Hay poco espacio para cómicas, monologuistas, guionistas. Y de haberlas, ¡haylas!

¿Cómo se consigue una mayor visibilidad de las mujeres de la industria audiovisual?

Sin desfallecer. Cogiendo aire y luchando para evidenciar esa desigualdad y educando a las nuevas generaciones con criterios de paridad y conciliación. Y claro, con la colaboración de los hombres. Deben asumir que para que nosotras avancemos, ellos deben ceder espacio y empezar a renunciar a los privilegios adquiridos durante tanto tiempo. Y eso, va a costar.

¿Qué consejo le darías a las personas que quieren seguir tus pasos?

Que confíen en ellos mismos. Es una profesión maravillosa pero en la que se genera mucho ruido que te puede despistar. Y lo más importante, que al final del día, solo es un trabajo, por mucho que nos guste.

Selección de trabajos

Homo Zapping (2004-2007)

Buenas Noches Buenafuente (2012)

El culo del mundo (2014)

No perdis el compàs (2017)

Cases d’Algú (2018-2019)

Road Trip (2020-2021)

Amor Gastronòmik (2021)